Estadio: Pabellón de A Raña. Marín.
Otra jornada para olvidar.
Aunque nuestros chicos lo intentaron, no hubo manera de hacer frente a uno de los mejores equipos de esta temporada.
Desde el principio el partido estuvo del lado de los locales, que supieron imprimir un ritmo de juego alto, situación que desorientó a los nuestros. El primer cuarto acabó con 25–4.
Los siguientes dos cuartos fueron un baile de cambios que no ayudó al Pontevedra a centrarse en ningún momento sobre la pista.
Solo unas cuantas jugadas aisladas permitieron levantar un poco los ánimos. Los marcadores lo dicen todo. 42–14 y 65-20.
El último tiempo fue, directamente, para olvidar.
Lleno de fallos en todos los sentidos, sin colocación en la pista, sin rebotes, sin un solo pase bien dado, sin un solo cambio para intentar paliar la debacle y, sobre todo, sin ilusión. Es decir sin nada de nada.
Esta situación permitió al rival poner en el marcador final un 96-22.
Mi reflexión personal es la misma de siempre: hay que alabar en este grupo la ilusión y las ganas de seguir a pesar de los resultados adversos.
Aunque nuestros chicos lo intentaron, no hubo manera de hacer frente a uno de los mejores equipos de esta temporada.
Desde el principio el partido estuvo del lado de los locales, que supieron imprimir un ritmo de juego alto, situación que desorientó a los nuestros. El primer cuarto acabó con 25–4.
Los siguientes dos cuartos fueron un baile de cambios que no ayudó al Pontevedra a centrarse en ningún momento sobre la pista.
Solo unas cuantas jugadas aisladas permitieron levantar un poco los ánimos. Los marcadores lo dicen todo. 42–14 y 65-20.
El último tiempo fue, directamente, para olvidar.
Lleno de fallos en todos los sentidos, sin colocación en la pista, sin rebotes, sin un solo pase bien dado, sin un solo cambio para intentar paliar la debacle y, sobre todo, sin ilusión. Es decir sin nada de nada.
Esta situación permitió al rival poner en el marcador final un 96-22.
Mi reflexión personal es la misma de siempre: hay que alabar en este grupo la ilusión y las ganas de seguir a pesar de los resultados adversos.
Diario de Pontevedra 04-02-2014
Clasificación
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